En Cemig valoramos la prevención y la lucha contra el fraude, la corrupción y cualquier acto que pueda representar desviaciones de nuestros estándares ya establecidos.
Foto: iStock
La palabra compliance significa “estar de acuerdo con”. Es esencial asegurar que la empresa cumpla con las normas sociales y la legislación de las comunidades en las que opera. En otras palabras, la función principal de compliance es vigilar y asegurar que todos los que participan en una empresa cumplan con sus prácticas de conducta y normas internas, así como con las leyes y reglamentos de los lugares en que está presente.
No es diferente aquí en Cemig. Con base en nuestro compromiso de mantener un alto nivel de ética e integridad en la conducción de nuestros negocios, valoramos la prevención y el combate del fraude, la corrupción y cualquier acto que pueda representar desviaciones de nuestros estándares establecidos.
Para reforzar la transparencia y la honestidad con nuestros socios, hacemos públicos nuestros Requisitos de “Compliance” (LINK) a los Proveedores de Materiales y Servicios. En este documento, dejamos claros varios puntos, tales como:
- principios éticos y la estructura de nuestros controles internos;
- expectativas y deberes al realizar negocios con nuestros socios;
- exigencias mínimas para la adopción de requisitos de integridad y conformidad.
Además, proporcionamos un Cuestionario de Diligencia Debida (“Due Diligence”) sobre “Compliance”, que se aplica anualmente a los proveedores contratados tanto de materiales como de servicios. A través de él se calcula el Indicador de Integridad del Proveedor (INIF), cuyo resultado se utiliza en el Monitoreo del Desempeño del Proveedor, de acuerdo con una regla específica.
Quiere hablar con nosotros? Escriba a: